La dramática imagen de una pitón en Australia tratando de escupir lo que había tragado era una serpiente de otra especie pero con un tamaño no inferior al tamaño de la propia pitón, impactando a una mujer.

Recientemente, Amanda Yongedik, una mujer que trabaja en un campamento para personas autistas en Australia Occidental, presenció accidentalmente la dramática escena de una pitón escupiendo la serpiente que se había tragado.

Según la Sra. Amanda, descubrió la pitón por la mañana en el campamento donde vive Amanda. En ese momento, la pitón estaba llena, pero aun así todos la metieron con cuidado en una bolsa y la llevaron lejos para que no se comiera las gallinas.

Pero tan pronto como Amanda y su esposo soltaron a la pitón gigante , ésta comenzó a eructar ruidosamente y luego una cola emergió de la boca de la pitón.

Lentamente, la segunda serpiente salió gradualmente del estómago del depredador.

La serpiente que acaba de escapar de la boca de la pitón parece una serpiente de agua o una serpiente, y tiene aproximadamente el mismo tamaño que la persona que se la acaba de comer. Lo sorprendente fue que la serpiente todavía estaba viva, ilesa e inmediatamente se alejó arrastrándose muy rápidamente.